Evangelio del 22.12.11: Evangelio según San Lucas 1,46-56.
"María dijo entonces: "Mi alma canta la grandeza del Señor, y mi espíritu se estremece de gozo en Dios, mi Salvador, porque el miró con bondad la pequeñez de tu servidora. En adelante todas las generaciones me llamarán feliz, porque el Todopoderoso ha hecho en mí grandes cosas: ¡su Nombre es santo! Su misericordia se extiende de generación en generación sobre aquellos que lo temen. Desplegó la fuerza de su brazo, dispersó a los soberbios de corazón. Derribó a los poderosos de su trono y elevó a los humildes. Colmó de bienes a los hambrientos y despidió a los ricos con las manos vacías. Socorrió a Israel, su servidor, acordándose de su misericordia, como lo había prometido a nuestros padres, en favor de Abraham y de su descendencia para siempre". María permaneció con Isabel unos tres meses y luego regresó a su casa".
Nicolás Neville de Anquin:
Esto es un bello himno a la misericordia de Dios con los hombres, y en especial con la que iba a ser Madre del Salvador. Fíjense antes de hablar de las maravillas de Dios para con los mas pequeños, relata la exaltación del alma de María por la grandeza del Señor y el estremecimiento de su gozo en Él; Este gozo, esta alegría extrema que experimentó
De Nicolás José Neville jueves 22 de diciembre de 2011
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